Y un día más, siguiendo nuestra ruta por Marruecos, nos dirigimos al desierto de Zagora.
El camino es complicado, carreteras estrechas llenas de curvas, que si a eso le juntas como conducen los marroquíes estarás rezando para llegar. Después de 6 horas de coche habiendo parado en lugares realmente bonitos, llegamos a nuestro destino: El desierto de Zagora, donde nos esperaban nuestros camellos para llevarnos al campamento donde pasaríamos la noche.
Después de un día intenso estábamos deseando llegar a nuestra haima, la cual estaba a mas de 50 grados y estaba claro que para dormir lo íbamos a tener complicado. Sinceramente, eso que dicen que en el desierto hace frío de noche, será en invierno, porque en pleno agosto esa haima era como estar en el infierno.
Después de pasar la noche bajo las estrellas, ya que era imposible estar dentro, llegó el ansiado amanecer y con ello nuestra partida de nuevo a Marrakech.
Una experiencia diferente, una aventura que todo el mundo debería vivir una vez en la vida.. pero solo una! jejeje..
Continuará..
Deportivas/sneakers: Adidas Stan Smith (Old)
Bolso/Bag: Michael Kors (New)
Vestido/dress: Zara (Old)
Gafas/Sunglasses: Gucci (Old)
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